El fuero Contencioso Administrativo se convirtió en el freno para la realización de obras públicas en la Ciudad. Atendiendo presentaciones de vecinos y agrupaciones barriales, ya son 18 las construcciones que están detenidas por orden de la Justicia.
Por Clarisa Ercolano
La pelea por el espacio público en una ciudad abarrotada de gente es una constante en Buenos Aires. Sin embargo, de un tiempo a esta parte, vecinos y organizaciones barriales lograron, al amparo de la Justicia, detener construcciones planeadas por el Gobierno de la Ciudad que creen perjudiciales para su entrono. En total, 18 obras están paradas a la espera de una resolución definitiva.
Quince túneles de pasos bajo nivel en calles de distintos barrios, el estacionamiento subterráneo en Parque Las Heras, el CGPC de Boedo y el edificio del Banco Ciudad en Parque Patricios dan un total de 18 obras públicas que, medida cautelar mediante, están detenidas aunque no frenadas para siempre. El motivo del éxito vecinal reside en que el Gobierno de la Ciudad no efectúa mecanismos de consulta antes de comenzar las obras.
A fin de año, la Justicia porteña dio lugar a una acción de amparo presentada por la Asociación Civil, Cultural, Ambiental “Todos por la Plaza de Boedo” y resolvió suspender la licitación pública encarada por el Gobierno de la Ciudad para construir allí un CGPC.
Algo similar sucedió con el estacionamiento del Parque Las Heras cuando los vecinos de Palermo se quejaron porque más de la mitad de la plaza se había convertido en un obrador. Finalmente, interpusieron una medida cautelar que paralizó la obra. En el mismo sentido, quince pasos bajo nivel también están detenidos por órdenes judiciales. Muchos de los “sapitos” se diseñaron sobre calles en las que ni siquiera hay barreras, por lo que los vecinos decidieron acudir a la Justicia.
También están en pleno reclamo desde la Proto Comuna de Caballito. El juzgado en lo Contencioso y Administrativo número 14 deberá resolver si hace lugar al recurso de amparo presentado que requiere la suspensión de la entrega de permisos y finales de obra en cinco barrios en los que un estudio de la empresa Aysa determinó un grado “crítico” del sistema de agua y redes cloacales. La misma ONG logró ponerle un freno al Shopping de Caballito que planeaba proyectarse sobre la playa de maniobras del Ferrocarril.
Algo similar ocurre con quienes viven en Chacarita y Villa Crespo y se oponen a la construcción de una comisaría de la Policía Metropolitana en el predio de los talleres Los Andes. Los habitantes de esos barrios quieren un polideportivo y no un destacamento policial.
La construcción del nuevo edificio del Banco Ciudad, en Parque Patricios, fue objetada por la diputada de la Coalición Cívica Rocío Sánchez Andía, quien logró una medida judicial para frenar la obra, pero que quedó sin efecto por riesgo de derrumbe en caso de no seguir adelante.
Somos una ONG cuyo propósito es el estimulo de las herramientas de participación ciudadana con la certeza que esto promoverá una mejor calidad de vida. Nos basamos en la cooperación entre los vecinos a los efectos de potenciar las capacidades generales. Buscando pasar de un conocimiento ingenuo a uno critico. Tanto de el entorno mediato barrial. de la Ciudad, o la Nación.
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