En Virasoro al 700, los vecinos no podían regresar a sus casas o utilizar ninguno de los serviciones de luz, de gas, ni agua. (Télam)
Alrededor de las 12 comenzó el escape de gas en la calle Valentín Virasoro al 700, en el barrio porteño de Caballito. "Iniciaron la demolición hace un mes y medio, de dos lotes, y hoy empezó a trabajar esa excavadora gigante como esa que provocó el derrumbe en el gimnasio de Villa Urquiza", explicó en América 24 Gustavo Desplats, coordinador de la protocomuna.
Describió que la máquina "enganchó un caño de gas, que explotó y colapsó y provocó una pérdida de grandes proporciones". Así fue que desde las 12.20, la Policía Federal impedía la llegada de vehículos y cortó la circulación peatonal también. Llegaron los bomberos, acordonaron el predio y pidieron a vecinos que no prendieran fuego ni correinte eléctrica en sus casas para evitar cualquier posible explosión en la zona.
Desplats subrayó la falta de controles en las obras: "Queremos remarcar que el Código, el abc de la construcción, dice que hay que cortar suministros de cualquier servicio: agua, cloacas, gas y electricidad, antes de hacer un trabajo así. Que esta máquina haya roto en el caño no es impericia del maquinista: es una nueva demostración de la falta de cumplimiento de las normas, un modelo constructivo en la Ciudad que no funciona, que busca maximizar retornos minimizando los tiempos de la obra, con menor calidad de materiales y personal no calificado. Estos accidentes son el resultado", sintetizó.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario